Nuestro enfoque de trabajo se orienta al cambio social de comportamiento que busca poner fin a las prácticas y tradiciones culturales dañinas o que ponen en riesgo a las niñas, niños y adolescentes principalmente en contextos de movilidad, al tiempo que fomenta comportamientos positivos relacionados con el género, la protección contra la violencia, la salud y la educación; y el enfoque de salud mental que reconoce que la angustia psicosocial experimentada por las personas al comienzo de cualquier emergencia o en el contexto de abuso y violencia es un problema real que requiere atención y apoyo profesional.
Se trabaja en zonas fronterizas con Honduras y México, apoyando albergues de sociedad civil y puntos de atención, proporcionando atención psicosocial, así como ayuda humanitaria; además, se generan procesos de seguimiento a niñez y adolescencia no acompañada en comunidad de origen, para acompañar los procesos de reintegración familiar y comunitaria, principalmente en los departamentos de Huehuetenango, San Marcos, Alta Verapaz, Quiché, Quetzaltenango, Sololá y Totonicapán.
El apoyo al sector gubernamental se orienta en dos líneas: a) fortalecimiento de las instituciones rectoras, a través de asistencia técnica orientada a que brinden una atención digna y con enfoque psicosocial, para ello se apoya en el desarrollo de herramientas, rutas, modelos, procesos, capacitación, entre otros; b) asistencia humanitaria, para lo cual se apoya con personal psicosocial y médico la atención directa en albergues de gobierno, centros de recepción y zonas fronterizas; esto incluye la dotación de kits humanitarios diferenciados por edad y género.
Este trabajo permite a las instituciones de gobierno poder implementar acciones en el marco de la protección de las niñas, niños, adolescentes y sus familias en contexto de movilidad, considerando al niño o niña como sujeto de derecho y garantizando el interés superior del niño en todo momento.
A la fecha se trabaja con Instituto Guatemalteco de Migración -IGM-, Ministerio de Relaciones Exteriores -MINEX-, Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia -SBS- y Procuraduría General de la Nación -PGN-.
A través de organizaciones se sociedad civil: Refugio de la Niñez, Asociación Pop No´j, ECAP, Pastoral de Movilidad Huma, Médicos del Mundo, Red Jesuita con Migrantes / Fe y Alegría, IEPADES y Fundación Sobrevivientes, se conforma un consorcio que busca fortalecer técnicamente a las instituciones de gobierno para cumplir con los estándares de atención directa y operativa a niñez, adolescencia y sus familias en contexto de movilidad, especialmente tras el aumento de los flujos mixtos de los últimos años por territorio guatemalteco, así como los servicios prestados en forma directa por sociedad civil.
También, a partir del año 2022 UNICEF trabaja en coordinación inter agencial del Sistema de Naciones Unidas, con OIM y ACNUR en la implementación de espacios seguros para niñez, adolescencia y sus familias en los Centros de Atención para Personas Migrantes y Refugiadas -CAPMiR-, que permiten la prestación de servicios y de atención directa, información y referenciación a personas en contextos de movilidad humana, en especial a servicios de protección y de apoyo humanitario (contención emocional, apoyo psicosocial, atención en salud, orientación legal, consumo de agua segura, llamadas telefónicas para el restablecimiento de comunicación con sus familiares, entrega de kits, entre otros).
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